Los itinerarios personalizados de empleo para personas con discapacidad en Castilla y León lograron un 30% más de contratos en 2015 respecto al año anterior, hasta rozar los 1.200, de los que 750 correspondían a centros especiales de empleo y 439 —un 35% más que en 2014— a empresas ordinarias.
Son 300 contratos más que el ejercicio anterior, que se explican, sobre todo, por la apuesta de la Administración regional con este modelo que busca facilitar a las personas con dispacidad la realización de una auténtica carrera profesional, que abarca desde una formación adecuada a las personas hasta el desempeño profesional, pasando por prácticas laborales en empresas, orientación e intermediación laboral y la existencia de un proyecto de vida que garantice el máximo grado de autonomía personal y de participación efectiva en la sociedad.
Financiación y perfiles
La Junta triplicó en 2015 la cantidad destinada en 2014 a los itinerarios con 3,3 millones de euros. Este presupuesto aumentará hasta los 4,3 millones en 2016 para financiar la inserción laboral de las personas con discapacidad.
En cuanto a los perfiles de los usuarios, la mayoría es desempleado de larga duración (72%) y personas inactivas (15%). Los sectores de actividad van desde la limpieza, correo y publicidad y tareas administrativas hasta la logística de almacenamiento y reparto, lavandería y planchando pasando por la hostelería y los servicios sociales.
Junto a estos beneficiarios, los itinerarios permitieron la realización de prácticas a 723 personas, 498 en centros especiales (un 9,2% que el año anterior) y 225 en empresas.