Ambas entidades lamentan que la Ley de Medidas Urgentes para la Reforma del Mercado Laboral no mantenga la medida extraordinaria que subvencionaba, con un 75% sobre el salario mínimo, la contratación de personas con especiales dificultades de empleabilidad. Además, alertan que la vuelta al 50% de subvención no cuenta con respaldo presupuestario, lo que deja en entredicho su verdadera efectividad
Una mayoría de personas con discapacidad intelectual se ve gravemente afectada por esta medida, que merma su derecho de acceso al empleo en igualdad de condiciones, y que afectará seriamente a sus posibilidades de conseguir trabajo
TEXTO: FEAPS y AFEM | FOTO: AMPROS
La Ley de Medidas Urgentes para la Reforma del Mercado Laboral acaba de terminar su tramitación parlamentaria. La aplicación de su disposición final duodécima, referida a la “aplicación de acciones y medidas de políticas activas de empleo”, supone que no se mantenga la medida extraordinaria que fijaba una subvención del 75% sobre el salario mínimo interprofesional para la contratación de trabajadores y trabajadoras con especiales dificultades de empleabilidad. Con ello esta subvención volverá al nivel del 50%.
Por tanto, FEAPS y AFEM lamentan que esta medida de discriminación positiva no vaya a mantenerse con la misma cuantía y alertan de que –teniendo en cuenta la partida destinada a inserción laboral en los Presupuestos Generales del Estado de 2012–, la financiación del 50% no está garantizada. La falta de dotación presupuestaria pone en serio riesgo la continuidad de dicha subvención, para el mantenimiento de miles de puestos de trabajo, en su transposición a las normativas autonómicas.
La mayoría de personas con discapacidad intelectual o del desarrollo se encuentra en situación de especial dificultad de inserción laboral y con este recorte en los Presupuestos, cercano al 30% respecto al 2011, ven seriamente mermado su derecho de acceso al mercado laboral en igualdad de condiciones que el resto de trabajadores.
El pasado 14 de mayo, el presidente de FEAPS, Juan Cid, envió una carta a la ministra de Empleo y Seguridad Social, Fátima Báñez, con el fin de solicitarle la permanencia de la medida extraordinaria que fijaba la ayuda en el 75%, en línea con las reivindicaciones planteadas desde el Comité de Representantes de Personas con Discapacidad (CERMI). En aquella carta Juan Cid advertía que esa medida –que se estableció de forma transitoria por el artículo de la 8 de la Ley 27 / 2009– resultaba “imperativa para asegurar que nuestros Centros Especiales de Empleo (CEE) sean capaces de mantener en sus plantillas a trabajadores con mayores dificultades de inserción laboral”, lo que en última instancia supondría “una verdadera brecha insalvable, para que su contribución como ciudadanos de pleno derecho sea un aporte más para que juntos podamos superar estos momentos de gran dificultad”.
Además, durante el trámite de los Presupuestos Generales del Estado, FEAPS y AFEM mantuvieron contacto con todos los grupos parlamentarios en el Senado, con el fin de pedirles su apoyo a las enmiendas presentadas para conseguir incrementar las partidas presupuestarias destinadas a la inserción laboral de personas con especiales dificultades y así, garantizar el mantenimiento de los puestos de trabajo.
